Por que la solidaridad fácil es la del dinero y no la del esfuerzo, pero hace falta el dinero para poder cubrir las necesidades de ese esfuerzo
Ya hace tiempo que estoy convencido que con el esfuerzo podemos cambiar algunas cosas, pero cuando tienes a tu alrededor gente que piensa como tú te das cuenta que es posible.
La mejor ayuda es la que se hace en el sitio que se necesita, pero lamentablemente muchos no podemos hacer esas cosas, por estar en países lejanos, por no ser investigadores... Pero nuestro esfuerzo si que puede permitir que otras personas puedan hacerlo.
Dos retos solidarios, de los muchos que hay, me están llenando estos días.
El primero es el de mi compañero Jonathan Grimes, aquí tenéis su blog donde relata el transcurso del reto http://triathlonfortibet.blogspot.com.es/.
Jonathan se ha propuesto, nada más ni nada menos que, juntando las distancias de las pruebas de este año, hacer un triatlón de 1.000km. Y lo mejor el ¿por qué?; para ayudar a la asociación JIN-PA Associació. Esta asociación ayuda a cubrir las necesidades básicas de todos lo refugiados en el Tibet.
Y el segundo reto el del Sanus Vitae Team. Este nos toca más de cerca, pero no por eso es ni más ni menos importante. Un reto de 450km en relevos de natación, ciclismo y carrera a pie para recorrer toda la costa de la Comunidad Valenciana en un mismo día.
Y la carne de gallina, para que niños del Cabañal puedan tener un beca comedor y poder llevarse algo al plato. Si puedo estaré con todos los compañeros del Sanus Vitae Team participando en el reto, que seguro que será todo un éxito.
Lamentablemente siempre los más desfavorecidos son los que más necesidades tienen, y encima esto se concentra en los niños y las mujeres.
Podéis ayudar a las dos causas a través de la web: migranodearena.org
Esta claro que no podemos ayudar a todas las causas, que no podemos cambiar nosotros solos el mundo, pero si creo que algo podemos modificarlo.
Os animo a ser solidarios, no es más solidario el que más da en cantidad, si no en porcentaje y calidad. Toda ayuda que prestemos se nos será correspondida con una de las palabras más bonitas que ha conocido el ser humano: GRACIAS.
Por cierto, guardaros algo para mi princesita África y su asociación ACTAYS, por ella y todos los niños estaré pedalenado cerca de 1.000km non stop de Lisboa a Valencia el próximo julio con mi compañero Antonio Peinado.
Que preciosidad de niña y cuantos trocitos de mi corazón llenan todos estos niños. Muchos trocitos de mi corazón me dañan, pero me dan las fuerzas para seguir haciendo todo lo posible por ellos.
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