Sin palabras. Ya lo dice el dicho "una imagen vale más que mil palabras".
Ayer fue uno de los días felices de mi vida. Que te envíen una foto desde una aldea de Tanzania como esta, para mi, es una de las cosas más grandes que me ha sucedido.
Mi esfuerzo, mis pedaleadas y mis sueños les llegan a otra gente que nos necesita, y tienen un sentido.
Pero que foto. Tienen cabras, y una choza. Pero ya no se ve más. Y estos niños y mujeres también viven en el mismo mundo que nosotros.
Ves todo lo que tenemos nosotros a nuestro alrededor; nuestras ciudades, nuestros medios de transporte, nuestra educación, nuestra sanidad, nuestras casas, nuestra neveras, el agua potable, la luz, la televisión, radio, ordenador, móvil... Muy triste el tener todas estas cosas y que vecinos nuestros del mundo no tengan nada.
Muy contento por la ayuda que les estoy prestando a estos niños y mujeres Masai a través de mi esfuerzo, pero por otra parte triste por ver lo que cuesta que la gente nos ayude a recaudar fondos para ellos.
700€ me había propuesto en el Ojos Negros Up&Down, y como no los conseguí me empeñé en volver a esforzarme y sacrificarme, y este jueves volveré a hacer un reto, Madrid-Valencia con la bicicleta.
Unos 750 kilómetros recorreré en total para intentar recaudar estos 700€. Cuanto esfuerzo, cuanto sufrimiento, cuanto sudor, cuanto dolor...
Pero muchas veces me pregunto donde vivimos. No les quiero quitar el valor, pero me gustaría que la gente pensara en cuanto valoran el esfuerzo de un futbolista y en cuanto se valora mi esfuerzo, o el de muchos compañeros y gente como yo.
Un mundo mejor también es cosa nuestra. Siempre nos quejamos de las autoridades y los gobiernos, pero también deberíamos pensar en lo que nosotros podemos hacer y no hacemos.
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