Ya han pasado tres semanas des de la decepción del CSP 115 Castelló-Penyagolosa.
Al final, i después de intentarlo con toda la ilusión de poder realizar la prueba fue imposible. Los tres días anteriores con fiebre alta me dejaron el cuerpo fatal. Ya los días anteriores pintaba mal, pero ese día fue peor.
La mañana empezó a las 3:45h, ya que habíamos quedado de partir hacia Castelló a las 4:15h. La noche no había sido buena y aún estaba en fiebre, pero la ilusión la tenía bien.
Empece la prueba ya fatal, los días anteriores no había comido hidratos ni lácteos para no empeorar la congestión que me dejaron sin fuerzas, y ya en el segundo kilómetro me dolían las piernas y no tenía ganas de hablar. No eran buenas sensaciones para poder resistir 118 kilómetros por la montaña en una prueba tan extrema, con unas 20 horas por delante. Pero tenía que intentarlo. Seguí adelante pero todo empeoraba, cada vez estaba peor y veía que iba a ser imposible.
Una vez pasada la población de Borriol tomé la decisión de abandonar. Dani me animaba a seguir, que lo podía conseguir. Pero era imposible, el cuerpo cada vez iba a peor.
Unos 8km duró mi CSP, y un durísimo abandono. Pocas veces había llorado tanto. Una impotencia me invadió. Muchos meses de entrenamiento, larguísimas jornadas de entrenamiento; pero sobretodo muchos días dejando a mis hijos y mi mujer en casa, y para que una gripe o resfriado me dejara en la cuneta a los 8km. Lloré sobre todo por ellos, por no poderles demostrar que todo ese tiempo invertido había servido para algo, para poder superar otra de mis metas y una otra superación personal.
En principio la desilusión me izo pensar que todo el entrenamiento no había servido para nada, pero mi amigo y compañero Dani me demostró que el trabajo lo habíamos hecho muy bien.
Después del abandono volví a Castelló y con la furgoneta les acompañe por varios puntos de control. La fiebre me había subido muchísimo, y sufrí mucho, pero quería estar en la llegada de Dani a meta. Con poco más de 18h y 30min llego Dani a la misma, y nosotros teníamos una previsión de mínimo 20h. Impresionante. Y allí me dejo el buen sabor de boca de que yo hubiera estado cerca de esa meta mínima que nos habíamos propuesto.
Y esta semana me viene el nuevo reto. No lo tenía previsto, pero este sábado participaré el la TITÁNICA, una marcha ciclista de 204km, de los cuales muchos transcurren por donde debía haber pasado el día de la CSP.
Un abandono que no me ha quitado la ilusión, pero que si que me ha dejado clavada una espina que será difícil de quitar.
Enhorabuena a Dani Fuertes y Jose Luís Hortelano por haber terminado y ser Finishers en la CSP115.
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